
La espinaca (Spinacia oleracea L.) es ampliamente considerada como un alimento muy saludable debido a su composición nutricional diversa, que incluye vitaminas y minerales, fitoquímicos y bioactivos que promueven la salud más allá de la nutrición básica. La espinaca es una fuente comprobada de nutrientes esenciales como el caroteno (un precursor de la vitamina A), el ácido ascórbico y varios tipos de minerales. Además, se han realizado varios estudios sobre las actividades antioxidantes de las espinacas, concluyendo que son una fuente potencial de antioxidantes naturales y su consumo mejora el estado antioxidante.
También vale la pena señalar que la espinaca también sirve como una muy buena fuente de seis nutrientes adicionales, que incluyen fibra, fósforo, vitamina B1, zinc, proteínas y colina, y como una buena fuente de ácidos grasos omega-3, vitamina B3 , ácido pantoténico y selenio.
Ingredientes (para 2 personas)
- 1 manojo de espinacas cocidas y escurridas
- 2 champiñones laminados
- 6 placas de lasaña
- 1/2 cebolla picada
- queso de untar
- queso mozarella fresca
- 1 vaso de leche
- aceite
- sal nuez moscada
- 1 cucharada de harina
- tomate frito
Preparación
Sofreir en una sartén la cebolla, espinacas y champiñones. Cocer la pasta y colocar sobre un paño limpio para secar.
Colocar sobre una bandeja cuadrada pequeña de cristal, una base de tomate frito e ir colocando capas de placas de lasaña y de salteado de espinacas con queso de untar, sobre la ultima capa verter bechamel ( 1 vaso de leche, 1 cucharada de harina, una de aceite, sal y nuez moscada) y mozarella fresca.
Hornear para gratinar, unos 15 minutos a 200 grados.